El patrón o capitán de yate es un título muy importante y que ofrece muchos beneficios, tales como gobernar muchos tipos de embarcaciones y tener acceso para navegar en la costa a distancias largas (de hasta 150 millas).
Pero, para poseer este título, se debe contar con ciertos requisitos: superar un examen, poseer el título de patrón de embarcaciones de recreo y ser mayor de edad.
Si quieres saber cuáles son las atribuciones de un patrón o capitán de yate, continúa leyendo…
Atribuciones de un patrón o capitán de yate
En cuanto a las atribuciones patrón de yate, podemos indicar las siguientes:
- Con este título se puede navegar embarcaciones de motor y vela hasta un total de 24 metros de eslora.
- Se podrá navegar a unos 241 kilómetros de la costa.
- Se puede navegar tanto en el día como en la noche sin problemas.
- Se pueden prestar diversos servicios profesionales al público, como transporte, maniobras en puertos y playas, pruebas y socorrismo.
- El capitán de yate podrá manejar cualquier moto de agua sin importar el tipo o diseño.
- Se pueden realizar excursiones turísticas y de pesca, con un total de 6 pasajeros.
- Se pueden trasladar las embarcaciones entre puertos.
- Entre otras.
No hay dudas que las atribuciones capitán de yate otorgan muchos beneficios, ya que abre las puertas al individuo para realizar distintas actividades en tierra y mar.
Condiciones para ser patrón o capitán de yate
Para obtener el título de patrón de yate, se debe cumplir con las siguientes condiciones:
- Tener 18 años de edad como mínimo.
- Se debe ser patrón de embarcaciones de recreo, para así poder optar por el título de patrón de yate.
- Se debe contar con el título de radio-operador.
- Se debe aprobar el examen teórico correspondiente al título de patrón de yate.
- En cuanto a seguridad y navegación, se deben aprobar todas las prácticas correspondientes.
- Se debe realizar la prueba de aptitud psicofísica.
Indistintamente de estas condiciones o requisitos, las atribuciones patrón de yate profesional son muy beneficiosas, por lo tanto, vale la pena poseer este título, sobre todo para las personas que laboren con embarcaciones.
¿Qué son habilitaciones anejas?
Es un título que puede ser adquirido por los capitanes de yate. En este caso, las habilitaciones anejas permiten gobernar embarcaciones que no sean para fines comerciales, sino ¡recreativas!
Por lo tanto, las habilitaciones anejas permitirán al capitán o patrón de yate lo siguiente:
- Prestar servicios de transporte de suministros en aguas interiores (a una distancia máxima de 5 millas náuticas del puerto o playa).
- Habilitación de atraque, fondeo, remolque o desplazamiento de embarcaciones.
- De igual manera, si la embarcación se va a trasladar a otro puerto, no puede superar las 5 millas de distancia.
- Realizar pruebas de mar a todo tipo de transporte marítimo.
Recordemos que todas las actividades recreativas que se realicen, no podrá exceder del número de pasajeros o el volumen de carga diseñada para la embarcación.
¿Qué hacer con el PER?
Actualmente, el PER ha adquirido nuevas atribuciones profesional, para así poder ejercer algunas actividades como patrón de embarcaciones de recreo: 5 millas del puerto, navegación diurna y nocturna, entre otras.
Pero, todas las actividades cuentan con ciertas condiciones. Por ejemplo, se necesita el título PER y completar ciertos cursos básicos sobre las normas del mar.
Por otra parte, el PER permite gobernar las siguientes embarcaciones:
- Embarcaciones de recreo con ánimo lucrativo.
- Embarcaciones de recreo sin ánimo de lucro.
- Buques de la administración, defensa y salvamento.
Adicionalmente, algunas de las embarcaciones tienen que ser autorizadas por el capitán de yate, para que de esta forma la persona con título PER pueda manipularlas.
Siguiendo con el tema, las labores que puede ejercer un individuo con título PER son:
- Transportar suministros a embarcaciones de recreo.
- Autorización para atracar, amarrar y fondear algunos tipos de vehículos marítimos.
- Realizar pruebas de mar a las embarcaciones.
- Ser tripulante en buques de recreo.
- Ser socorrista de embarcaciones.